Muchos viejos usuarios de Twitter estamos ya buscando una alternativa a esta red social, pero no es fácil. Estuve la semana pasada en Estados Unidos y pude comprobar que muchas personas de mi perfil han abandonado Twitter por Mastodon, pero de momento, en Europa esta red no nos dice nada. Otras alternativas como Instagram o Tik Tok, se nos antojan demasiado superficiales y no nos parecen que estén diseñadas para el modelo de conversación al que estamos acostumbrados en Twitter. Facebook por otra parte se nos hace anticuado, demasiado abigarrado y comercialmente intrusivo. Y Linkedin, con un foco marcadamente profesional, adolece de frescura social.
Pero mientras Elon Musk el empresario se afana en convertirse en Elon Musk el chiflado, alguien estaba observando y actuando. Aunque parecía que Mark Zuckerberg se estaba lamiendo las heridas por la caída de su metaverso, canibalizado por el hype de la Inteligencia Artificial, en realidad seguía perseverando en su plan maestro de acaparar la conversación social global, en el que el metaverso no era más que una pieza más. Ya demostró con las compras de Instagram o Whatsapp que su ambición va mucho más allá de Facebook y ahora lo hace con un producto propio: Threads. Con este proyecto desvela además su objetivo de consolidar una plataforma tecnológica que federe a todas sus plataformas sociales.
Threads, la nueva red de Meta, es claramente un producto diseñado para capturar a los usuarios de Twitter. Threads utiliza el mismo concepto de interfaz simplificado y un esquema conversacional de economía de palabras, de hilos y de enlaces, permite controlar quien te sigue e incluso quien te replica, y aporta un modelo de moderación de conversación como el de Instagram que limita spam y la propagación de la conversación de odio, un buen reclamo para muchos usuarios y especialmente para los anunciantes.
Threads tiene el objetivo de alcanzar los mil millones de usuarios: la oportunidad es clara y cuenta con el viento a favor, ya que el propio Elon Musk parece empeñado en empujar a su comunidad fuera de Twitter. Y además cuenta con una gran operación de marketing para vencer el horror vacui que todos tenemos de empezar desde 0 en una red social: Meta ha creado una pasarela desde Instagram que te permite empezar tu andadura importando a Threads a todos tus seguidores desde esta aplicación. Eso sí, nada es gratis, porque a cambio, Meta obtiene mayor información de los usuarios.
Parece que la estrategia le está funcionando a Zuckergberg: En apenas 3 días, 97 millones de usuarios de Instagram ya han adoptado la nueva, y a esto hay que sumar los usuarios que no proceden de esta red. Por tanto Threads parece haber superado la velocidad de adopción de cualquier otra tecnología, incluso batiendo a ChatGPT que llegó a 100 millones en 2 meses. Y eso a pesar de que todavía no se ha lanzado en la Unión Europea: al igual que Google, Meta está esperando la aprobación de la Ley de Mercados Digitales para no tener problemas de exportación de datos con las autoridades europeas.
Musk amenaza con demandar a Meta ante los tribunales por copia, pero aun teniendo claras similitudes con Twitter, Threads es un producto diferente, y ya hemos visto por los casos de Snapchat o Tik Tok que la demandas de este tipo no suelen prosperar. Pero, ¿para qué discutir si se puede pelear? a Elon Musk solo le ha quedado el recurso de retar a Zuckerberg a combatir a guantazo limpio en el octógono de la MMA. Pues visto lo visto, incluso con los guantes puestos, yo apostaría por Zuckerberg.