La toma de decisiones empresariales está estrechamente ligada a los valores que se desea transmitir tanto al exterior como a nivel interno. Aunque pueda parecer una obviedad, no todas las empresas entienden que tener una lista de valores corporativos no sirve de nada sino los aplicas en cada decisión llevada a cabo.
Los valores internos y externos están cada vez más vinculados a la responsabilidad social corporativa. Los trabajadores quieres formar parte de empresas socialmente responsables, que tienen en cuenta temas como el medio ambiente, la paz mundial, y por descontado los derechos de sus trabajadores.
Si se consigue esto, no solo acabará reflejándose en cómo te ven tus clientes, sino que tus empleados serán los perfectos prescriptores de esos valores que sentirán como suyos.
Valores internos para el entorno laboral
Clima laboral seguro: seguridad a nivel general, protección contra el acoso laboral, espacios acondicionados y para todo tipo de personas (discapacitados). Clima laboral que estimule la creatividad y haga sentir a cada individuo que sus opiniones cuentan. Cooperación interdepartamental: la relación entre las distintas estructuras de la empresa, debe ser fluida y en un ambiente de colaboración constante. Aprendiendo unos de otros y ayudando de esta forma a que la empresa crezca. Respeto por las normas que hayas establecido, y justicia a la hora de implementar sanciones en caso de que fuera necesario.
Valores meramente empresariales
Comercio justo: no explotar recursos en países desfavorecidos, no hacer guerra de precios, y no ser desleal hacia los clientes en la relación calidad-precio. Competencia sana: es un mantra que todas las empresas deberían interiorizar. Finalmente atacar a tu competencia en lugar de centrarte en hacer que lo que tú ofreces tenga mejor calidad y servicios, te está perjudicando más a ti, y estarás dañando tanto tu reputación como la de otra parte. Ética en los negocios: no traspases líneas que tu código moral no acepta, sólo por hacer un cliente o un negocio con grandes beneficios. Ser fiel a uno mismo debe aplicarse también en tus proyectos laborales. Relaciones de calidad con clientes, proveedores, accionistas y comunidad. No sacarás ningún beneficio de una relación tensa e incluso mala con estos grupos. Busca siempre el acuerdo y el beneficio mutuo. El ego no tiene lugar en las relaciones de negocios. Productos seguros: la calidad de lo que vendes es la calidad de tu empresa. No sirve de nada construirse una fuerte reputación cuyos cimientos están basados en la mala calidad de lo que te sustenta como empresa, el producto.
Valores socialmente responsables
Conciencia ecológica Respeto por el medio ambiente Responsabilidad social
Los tres términos están ligados a la Responsabilidad Social Corporativa. La cual implica que las empresas estén concienciadas con los problemas del mundo, tanto a nivel humano como ecológico, y que a través de los recursos de los que dispone, colabore en la medida que pueda, para mejorar el mundo y la sociedad. Se trata de la utilización de la propia influencia y poder para un bien mayor.
En conclusión, no debes olvidar que unos valores fuertes te ayudarán a construir una cultura empresarial fuerte, y asegurar de esta forma la supervivencia y prosperidad de tu empresa.
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