Por Mauricio Cabrera
La segunda mitad del 2020 se ha convertido en una invitación obligada al cambio. Los menos afectados realizan ajustes sobre la marcha para acercarse lo más posible a los objetivos trazados a comienzos de año. Los más afectados intentan explorar avenidas para garantizar la supervivencia de su empresa y convertir en oportunidad un contexto que para cualquiera resulta más problemático que esperanzador. En ambos casos, la inacción deja de ser una opción. Es tiempo de activar nuevos proyectos y probar con riesgos controlados. De atreverse a pisar nuevos terrenos sin que en ello se vaya la vida. Y para hacerlo, la opción recomendada es la metodología Scrum.
¿Qué beneficios presenta la metodología Scrum en un contexto de escaso margen de maniobra?
Concentración en el confinamiento
Parece absurdo dado que el contacto humano en un mismo espacio físico suele ser percibido como la mejor alternativa para desarrollar un proyecto; sin embargo, la Scrum Alliance, ONG que reúne a más 1.2 millones de personas que utilizan metodologías ágiles para sus proyectos, afirma que detrás de este obstáculo hay en realidad una oportunidad, pues termina significando una oportunidad invaluable para que todos los integrantes de un equipo se encuentren en igualdad de condiciones, lo que no ocurre cuando algunos se reúnen en una oficina y otros a la distancia, lo que es habitual en corporaciones y lo que suele derivar en distracciones de una u otra parte ante la desconexión que se produce al no compartir el mismo escenario.
Howard Sublett, Chief Product Officer de Scrum Alliance, recomienda que los integrantes del equipo estén en todo momento compartiendo audio y video para que la experiencia colectiva derive en mayor motivación y efectividad de cada uno de los involucrados.
Justo valor a las tareas por cumplir
El método Scrum representa un llamado a la correcta administración del tiempo. Bajo esta dinámica de trabajo se reduce la posibilidad de estar prestando atención a tareas que no resultan prioritarias o que desvían la atención de los objetivos estratégicos que se hayan trazado. Reúne lo mejor de dos mundos: el orden que se necesita para avanzar en el cumplimiento de una meta y el sentido de urgencia que hará que el desarrollo exija solo el tiempo estrictamente necesario para ser realizado.
Prueba, error y aprendizaje
La incertidumbre de esta época exige humildad y capacidad analítica para identificar errores y corregir sobre la marcha. El método Scrum llama a tener esas pausas necesarias para evaluar, validar y decidir los ajustes necesarios para que un proyecto sea exitoso. La atención en el paso a paso del proceso es clave para evitar llegar a un producto finalizado que después tenga que dar marcha atrás cuando ya se han perdido recursos y tiempo. Scrum permite una detección a tiempo de oportunidades.
El paso a paso en medio del desorden
Ante la sensación de caos no hay nada más útil que lograr estructurar un mapa que aclare el camino. Scrum permite convertir un objetivo mayor en una serie de piezas intermedias que al final llevarán al resultado deseado. La simplificación de ese camino resulta medular para evitar ansiedad, estrés y desgaste entre el equipo, que ante ese paso a paso muy bien especificado tendrá en todo momento una brújula que le permitirá mantenerse bajo el plan de vuelo trazado, a menos que los descubrimientos tras las entregas parciales lleven a reconsiderar alguna tarea a partir del prueba y error que promueve.
Scrum empodera a cada uno de los participantes
La desaparición de las jerarquías en términos de propuesta es una realidad que se acelera ante la adopción de metodologías ágiles. Frente a un entorno como el que vivimos, las empresas requieren de la participación de todo tipo de perfiles y voces para resolver encrucijadas a las que no habían sido expuestas con anterioridad. El método Scrum facilita dicha democratización a partir de la formación de pequeños equipos en el que cada uno de los integrantes tiene una capacidad de decisión lo suficientemente amplia para poder influir en el resultado del trabajo a desarrollar.Si quieres profundizar en tu conocimiento de las metodologías ágiles, cursa nuestro Master Internet Business, el programa ideal para adentrarse en el ecosistema digital. Solicita más información y agenda tu entrevista de admisión aquí.